El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) consiguió ayer su sexta pole position de la temporada –de seis posibles– al imponerse a todos sus rivales en el Gran Premio de Miami y culminar una jornada impoluta en la que volvió a demostrarsu enrome poderío en un circuito.

Verstappen registró un tiempo de 1 minuto, 27 segundos y 241 milésimas, 141 milésimas más rápido que el monegasco Charles Leclerc (Ferrari), que como en la carrera al esprint saldrá desde la segunda plaza, mientras que su compañero de equipo, el español Carlos Sainz (Ferrari), saldrá tercero al superar por tan solo cinco milésimas al mexicano Checo Pérez (Red Bull), cuarto a 219 milésimas de Mad Max.

Mientras, el español Fernando Alonso (Aston Martin) no rodó en la última ronda de clasificación, al caer en el segundo turno, y saldrá decimoquinto en la carrera de hoy, al quedarse a más de dos décimas de la décima posición. Además de Alonso, también cayó su compañero de equipo, el canadiense Lance Stroll (Aston Martin), que saldrá undécimo, además de los franceses Pierre Gasly (Alpine) y Esteban Ocon (Alpine), duodécimo y decimotercero, respectivamente, y el tailandés Alex Albon (Williams), que acabó decimocuarto.

A la tercera va la vencida pareció decirse a sí mismo un Verstappen que no había conseguido la pole position en ninguna de sus dos participaciones en el Gran Premio de Miami, pero que sigue buscando culminar un fin de semana de récord, tras liderar los primeros libres, la clasificación de la carrera al esprint, la carrera de este sábado y ahora la clasificación para la carrera de hoy. Sólo le falta el broche final, que buscará conseguir en un circuito en el que acumula dos victorias y en el que sabe cómo adaptarse a las dificultades de un trazado urbano en el que apenas hay agarre.