En junio de 2018, un hombre de 81 años se resbaló en la Plaza Nueva cuando el pavimento estaba mojado debido a la lluvia. Como consecuencia de la caída, T. M. N., que estaba en perfecto estado de salud, sufrió un traumatismo craneoencefálico que le provocó la muerte a los 17 días. Cinco años y medio después, la esposa y los hijos del fallecido han logrado que el Ayuntamiento de Sevilla les indemnice con 229.960 euros al entender la Justicia que el resbalón fue causado por el anormal funcionamiento de los servicios públicos, ya que el pavimento no era seguro para los viandantes cuando está mojado.

La Gerencia de Urbanismo ha acatado la resolución judicial desfavorable a los intereses municipales dictada por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 7, que estima íntegramente la indemnización reclamada. Según relató su familia, “el fallecido portaba un paraguas abierto en su mano derecha y, al pasar por encima de las cenefas de mármol rojo, mojadas y con cierta pendiente hacia abajo, resbaló cayendo hacia atrás, golpeándose violentamente con el suelo con la parte occipital derecha de la cabeza”, quedando inconsciente en el suelo. Fue atendido por una patrulla de la Policía Local que estaba aparcada en el Hotel Inglaterra y que avisó a los servicios de urgencia para trasladarlo a un centro hospitalario, donde finalmente falleció el 25 de junio de 2018.

La familia presentó una reclamación patrimonial ante el Ayuntamiento al entender que el daño causado fue consecuencia del funcionamiento anormal de los servicios públicos, “ya que ese pavimento es muy resbaladizo e incumple el Código Técnico de Edificación en cuanto a la seguridad frente al riesgo de caídas, que se acentúa en suelos mojados y sin que exista siquiera indicación alguna que advierta a los usuarios”. A juicio de los reclamantes, la causa del accidente fue “la no realización por parte del Ayuntamiento de su deber de tener y mantener los suelos públicos en condiciones de utilización segura por los ciudadanos”.

A raíz del accidente mortal, el gobierno municipal socialista realizó un tratamiento al pavimento de la Plaza Nueva, defendiendo la actuación realizada en la solería de mármol en la que primó la seguridad de los viandantes y se mostró proclive a “replantear” en un futuro la actuación combinando la seguridad y la estética.

El equipo de Antonio Muñoz explicó que la decisión de aplicar un microabujardado al pavimento de la céntrica plaza se tomó con el fin de incrementar su resistencia en caso de lluvia. “Este delegado estará satisfecho con el resultado de la Plaza Nueva si no se dan casos como los que hemos tenido que vivir”, apuntó Juan Manuel Flores, ex delegado de Hábitat Urbano.

El hombre de 81 años cayó al suelo debido a que el pavimento estaba mojado por la lluvia

Los técnicos de Urbanismo sostuvieron que, antes del microabujardado aplicado en consonancia con lo que se hizo en ciudades como Granada y Málaga, se aplicaron varios productos antideslizantes y con ninguno se logró una resistencia mínima de 45, que es lo que fija la normativa. Las pruebas siempre estuvieron por debajo de 35. En consecuencia, propusieron el abujardado con fresadoras, cuyo resultado es el que criticó en varias ocasiones Ciudadanos, que lo calificó incluso de “atentado estético y demasiado agresivo”.

Se trata de un tratamiento efectivo, en tanto que solventa de manera definitiva el riesgo de resbalar que entraña este pavimento cuando llueve. Esta operación se ha llevado a cabo sobre toda la solería de mármol de la céntrica plaza, compuesta por losas de color gris, blanco y rojo, realizando una actuación homogénea de todo el conjunto. Al tiempo que aplicaba este tratamiento, la Gerencia retiró las losas de mármol que se encontraban en peor estado de mantenimiento para su sustitución por otras nuevas.

La reurbanización integral de la Plaza Nueva es una de las tareas que el Ayuntamiento tiene pendiente desde hace años. Antes de su llegada a la Alcaldía, el popular José Luis Sanz comprometió la ejecución de esta reforma del espacio y, tras las municipales del pasado mes de mayo, aseguró que las obras empezarían tras la Semana Santa de este año. Una previsión que por ahora se mantiene intacta, aunque condicionada a una serie de factores. El alcalde popular comentó antes de cerrar el 2023 que sus planes siguen siendo los mismos, pero que el hecho de que se cumpla o no el calendario previsto no depende del gobierno municipal, sino de la celeridad en la tramitación del proyecto en la Comisión Provincial de Patrimonio.

Vista aérea de la Plaza Nueva desde la terraza del Hotel Inglaterra.