Sebastián Gallego. Presentador

"Me parece más complicado aparentar ser alguien que no eres, que ser tú"

  • Sebastián Gallego es copresentador, junto con Ana Milán, del podcats 'La vida y tal' (Podimo), que a principios de 2023 ganó un Ondas

Sebastián Gallego.

Sebastián Gallego. / M. G.

Con apenas 32 años, Sebastián Gallego (Sevilla, 1991) ya tiene un Ondas en su estantería. El copresentador del podcast La vida y tal se presenta como una persona amante de la televisión y natural como la vida misma, algo que ha sido una llamada de atención para muchas marcas que ya han contactado con él. Nacido en Sevilla pero criado en Córdoba, este andaluz es espontáneo y divertido, y se está ganando un hueco en el corazón del público.

–Sebastián, ¿es cierto que eres pluriempleado?

–Yo siempre digo que soy como Hanna Montana, que tengo un trabajo un poco más de persona normal de lunes a viernes y luego tengo los días del podcast. Yo trabajo en una agencia que se llama Thinketers en la que estoy en la parte de representación de talento, y llevo ya casi cinco años.

–Sin embargo, tengo entendido que lo que has estudiado es Derecho, ¿es así?

–Sí, hija, sí. A mí me encanta el periodismo, pero en ese momento vi muy claro estudiar derecho. Ahora mismo tampoco lo entiendo, eh. Así que yo me matriculé en Derecho y acabé la carrera, pero es cierto que ya en segundo año me di cuenta de que eso no iba a ser lo mío, y monté una revista online de televisión, Zapping Magazine, donde hacía críticas de realities, de programas y demás, que ha sido durante siempre una de mis cosas favoritas del mundo. Varios blogueros escribían y yo como que coordinaba, y hacíamos un montón de entrevistas. Todo eso desde Córdoba, que es de donde soy. Lo de la revista fue la bomba; me lo pasé pipa y aprendí un montón. Y gracias a este proyecto empecé como becario en el departamento de comunicación de Atresmedia.

Aquella etapa fue chulísima. Imagínate. Una persona que ha amado la televisión desde pequeño verse comiendo en el comedor de Antena 3 con los presentadores y demás, currando con ellos, organizando las ruedas de prensa, las entrevistas... Fue un trabajo muy bonito.

"Mi programa favorito es 'Operación Triunfo', y moriría si pudiera hacer algo ahí"

–Hay muchas personalidades televisivas que dan la sensación de estar interpretando un papel en sus programas, pero no da esa impresión contigo.

–Muchas gracias por la parte que me toca. Yo llevo en la televisión prácticamente nada, y desde la poca experiencia que tengo me parece muy complicado fingir. Es decir, me parece mucho más complicado aparentar ser alguien que no eres, que ser tú. A mí fue una de las cosas que me dijo Ana Milán cuando me propuso hacer el podcast, que la cosa iba de ser tú. Me dijo que aquí no se hacía que se hace, sino que se hace directamente. Y me acuerdo de eso, lo tengo nítido

La vida y tal va por la mitad de su tercera temporada y está siendo todo un éxito. Se te ve muy cómodo en ese formato, ¿es así?

–Ahora sí se me ve cómodo. En el primer programa no mucho (ríe). Yo había estado, tanto en Antena 3 como por mi trabajo de ahora, en mil rodajes. No me impone estar ahí. Pero, claro, una cosa es verlo desde atrás y otra cosa es ponerte delante de la cámara. En la reuniones previas al podcast decía que me iba a poner muy nervioso, y ellos querían que a mí se me viera nervioso y no grabar un piloto, por eso quedó el primer programa así, que ni me salía la voz y confundí los Testigos de Jehová con los Boys Scouts. Entonces, ¿se me ve como soy? Yo es que no lo sé hacer de otra manera.

Cartel de la tercera temporada de 'La vida y tal' Cartel de la tercera temporada de 'La vida y tal'

Cartel de la tercera temporada de 'La vida y tal' / Podimo

–Tanto que te gusta la televisión, ¿te planteas llegar a realizar una producción propia en un futuro?

–No, yo creo que eso es muy complicado. Me parece un berenjenal superimportante. Me encantaría seguir desarrollándome en la tele. Mi programa favorito es Operación Triunfo, así que me moriría si pudiera hacer algo ahí, pero producir yo lo veo muy complicado.

–Estás escalando en la fama, eres joven y cordobés. ¿Te sientes acogido por los medios andaluces?

–Me hace muchísima ilusión que sea de mi tierra, claro, pero yo soy superconsciente de lo efímero de la fama. Lo que quiero es que dentro de x años, si me piden una entrevista, me haga la misma ilusión que me ha hecho esta. A eso aspiro. Ahora mismo no me siento todavía famoso como tal .

–Dices que no eres famoso todavía, ¿qué es ser famoso entonces? 

–Esa es una pregunta muy complicada. Para mí, ser famoso es que tú te pongas en la Puerta del Sol y que te paren.

–¿Y a ti no te paran?

–Sí, a ver, a mí me paran por la calle, pero no es una cosa masiva. Hay presentadores de informativos que son vistos por dos millones de personas pero, luego, no lo para nadie en la Puerta del Sol porque no son populares aunque los veas y comas con ellos todos los días, y hay personas que no saliendo en la tele y sí en redes, ya son populares. Es una cosa rarísima.

–¿Tiene que ver más con la simpatía que uno genere?

–No sé si con la simpatía o con la familiaridad de la cara. Por ejemplo, el otro día en una boda alguien me dijo que me había visto en una serie. Y yo: pues dime en cuál (ríe). Hay gente a la que le suenas pero no te ubica. Luego hay gente maravillosa que te para por la calle y te dice “me habéis acompañado en todos los viajes que he hecho este verano”, y eso te da una alegría y un subidón importantísimo. Como cuando estás en el teatro y dices una gracia y la gente se parte, eso es como tocar el cielo con las yemas de los dedos.

–Después de casi tres temporadas en La vida y tal, ¿qué consideras que es lo que la gente más necesita escuchar?

–Pues creo que lo que la gente más necesita es compañía y reírse. Estamos en una sociedad tan polarizada, con las uñas sacadas y tan agresiva que la gente lo que quieENTREVISTA re es reírse. Yo, la mayoría del entretenimiento que consumo es para sentirme acompañado y pasar un buen rato.

–¿Cuáles son las circunstancias más comunes por las que la gente manda un audio a La vida y tal, amistad o amor?

–Pues no lo había pensado nunca, pero diría que me parece bastante empatado. Diría que por amor. Una de las cosas más maravillosas del podcast es que lo que te ha pasado a ti nos ha pasado antes a nosotros, así que, en parte, relaja la situación. Creo que incita a pensar: “pues si esto le pasa a tanta gente, no será tan grave”.

"Una de las cosas más maravillosas del podcast es que lo que te ha pasado a ti nos ha pasado antes a nosotros"

–A principios de este año, La vida y tal fue galardonado con un Ondas con el Premio Especial al Podcast Revelación. Eres muy joven y, como decías, llevas muy poco tiempo en este mundo. ¿Cómo lo gestionaste?

–Fue alucinante. Cuando comencé con La vida y tal se lo dije a mi abuela y ella ni siquiera sabía qué era un podcast, pero cuando ganamos el Ondas la llamé y le dije: “Abuela, que tu nieto ha ganado un Ondas”. Se puso supercontenta. Porque, claro, no todas las generaciones saben qué es un podcast, pero todas saben qué es un Ondas. Ese día dije todo lo que tenía que decir punto por punto, porque el discurso lo tenía escrito desde hacía seis meses. Claro, yo hice un discurso para decirlo ante el primer premio que nos dieran, cualquiera, pero resultó que ese primer premio fue un Ondas. Esa tarde estaba muy muy revuelto de nervios, de alegría, de orgullo.

–¿Ensayaste el discurso a lo Rachel Green (Friends)?

–Total, total. Completamente.

–Por último, Sebastián, vamos a cerrar este entrevista como lo hacéis en La vida y tal. Dime tú algo (que eres cultura pop) que también podría decir el rey emérito (cultura rock).

–Pues, de repente, si me equivoco, yo puedo decir perfectamente: lo siento mucho, me he equivocado, no volverá a ocurrir.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios