El Sevilla se ha apuntado la primera batalla judicial en el la demanda presentada por el futbolista francés Joris Gnagnon por despido improcedente contra la entidad sevillista. La firmeza de las pruebas en poder de la defensa jurídica de la entidad nervionense, con todo tipo de detalles sobre la falta de profesionalidad del jugador, aconsejó finalmente a los abogados retirar la demanda presentada justo el día en el que estaba fijado la vista en los Juzgados de lo Social.

La decisión era conocida por la entidad sevillista este lunes pasado. Ahora todo queda pendiente de la vía de la FIFA sobre la demanda presentada por Gnagnon por lo que él estima que ha sido una resolución de contrato injustificada. Dentro de los responsables jurídicos de la defensa del Sevilla la tranquilidad es absoluta, ya que se considera que los argumentos jurídicos y de todo tipo, respecto a las condiciones físicas en las que se presentaba el jugador, le deben dar la razón ante cualquier tribunal en el que se presenten.

Hay que recordar que el central francés se comprometió con otro equipo, concretamente el Saint Ettienne, en el pasado mercado invernal y que su ficha fue registrada el 1 de enero de 2022 con un contrato de seis meses. Sin embargo, pese a figurar con el número 23 en la web oficial de los verdes, no ha jugado ni un solo partido a tenor de los datos ofrecidos por las diferentes páginas de Transfermarkt, Flashcore y L'Équipe.

La vista para un posible acuerdo se celebró en el Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación el pasado martes 30 de noviembre y no se llegó a ningún entendimiento después de su despido. Esto suponía que todo debía acabar en el pleito correspondiente, fijado para el lunes 25 de abril, pero ahí desistió Gnagnon de su demanda y, por tanto, se anuló la cita judicial.

La ficha de Joris Gnagnon, en la web oficial del Saint Ettienne.

El Sevilla despidió a finales de septiembre a Gnagnon por estimar que existía una clara falta de profesionalidad, ante lo que el club entendió como reincidencia indisciplinaria respecto a las pautas de dietas y peso que rigen en el primer equipo para una dedicación como es la alta competición futbolística. El futbolista presentó una demanda contra este despido, mientras que negociaba su fichaje por el Saint Etienne, ya como agente libre.

El futbolista, de complexión fuerte, tenía previsto aducir que no había faltado al trabajo diario en la ciudad deportiva hasta que fue despedido por el club, y el Sevilla, en cambio, quería argumentar con todo tipo de pruebas que no ha cumplido con las pautas marcadas por el cuerpo técnico y los nutricionistas, que le implementaron un estricto régimen para bajar su evidente sobrepeso que el futbolista.

Ahora todo queda pendiente de que el juicio se lleve a cabo ante la FIFA, que fue la otra vía que había elegido el futbolista.